El Liceo Industrial de Santiago con 80 años de historia, se ubica al sur de la comuna de Santiago en el barrio Sierra Bella, con excelente conectividad a las redes viales que favorecen el acceso a nuestra institución educativa.
En estos años de historia, ha ido desarrollando una identidad particular, que se refleja en las políticas internas y en las actividades curriculares y extracurriculares con educación Técnico Profesional, desde sus orígenes, centrada en la misión de entregar una herramienta de trabajo y con ello posibilitar a los jóvenes una inserción al mundo laboral y un desarrollo integral como persona proactiva y ciudadano responsable.
El Liceo Industrial de Santiago nace por Decreto Nº 3421 del 8 de Junio de 1938, donde se crea la “Escuela de Artesanos de Sastrería“, bajo el entonces Presidente de la República don Arturo Alessandri Palma. En diciembre de 1993, el Liceo es entregado en administración a la “Fundación de Solidaridad Romanos XII” (FDSRXII) y en el año 2003 se instala una nueva especialidad “Electrónica”. El año 2006 logra acreditar las dos especialidades que se imparten hasta hoy Vestuario y Confección Textil y Electrónica.
Hoy gran parte de las actividades curriculares de la unidad educativa se canalizan en dos grandes focos: La convivencia escolar que permite el clima adecuado para la instalación prácticas pedagógicas centradas en el aprendizaje de calidad de todos sus estudiantes y el gran apoyo a los estudiantes con Necesidades Educativas Especiales (NEE)
Adscribimos al enfoque constructivismo como enseñanza, sabiendo que es más que una simple transmisión de conocimientos, lo asumimos como el cambio de la organización y métodos de apoyo que permitan a los estudiantes construir su propio saber hacer, entendiendo que no solo se aprende registrando en el cerebro, aprendemos construyendo nuestra propia estructura cognitiva. El constructivismo concibe el aprendizaje como resultado de un proceso de construcción personal y colectiva de los nuevos conocimientos, actitudes y vida, a partir de los ya existentes y en la cooperación de la comunidad y los profesores como facilitadores, dejando atrás el aprendizaje receptivo o pasivo que considera a la persona y los grupos como pizarras en blanco, donde la principal función de la enseñanza se transforma en depositar conocimiento, esto último se suma y fundamenta las propuestas que hoy nos lleva a la formulación de una metodología constructivista, sin embargo, es preciso indicar que se consideran e incluyen otros elementos de otras corrientes que complementan nuestra visión pedagógica, como la teoría del aprendizaje significativo es decir, que la persona que aprende necesita atribuir un sentido, un significado o importancia relevante a los contenidos nuevos, ellos sin duda requiere un trabajo para que cuando los contenidos y conceptos, objetos de aprendizaje puedan relacionarse con los contenidos previos del grupo y sobre todo deben ser adaptados a la etapa de desarrollo y en su proceso de enseñanza aprendizaje, con estrategias metodológicas diversificadas, ritmos y estilos que consideran las características y particularidades de los estudiantes y el grupo curso.